El lobo y el cazador
Sales de la casa del cazador y caminas entre las calles del pueblo buscando al lobo.
Pasan unos minutos y cuando llegas al centro ves una figura misteriosa moverse hacia ti. Si, sin duda es la bestia.
Corres en su dirección, con el arma preparada y cuando se percata de tu presencia se prepara para atacar, alzas el arma en su dirección y logras dispararle dejándolo inmóvil. Te aseguras que este muerto y te diriges a la alcaldía, allí notificas al alcalde de tus hazañas y te recompensa como es debido.
El día siguiente transcurre con normalidad, la gente empieza a tratarte como un héroe y tu no podrías estar mas feliz con ello. Sin embargo, esa noche tienes sudores fríos y dolores musculares insoportables, sales de tu casa y corres al bosque desorientado.
La gente del pueblo se pregunta qué fue de su héroe y porque los abandonó justo cuando una segunda bestia los comenzó a atormentar.
Pasan unos minutos y cuando llegas al centro ves una figura misteriosa moverse hacia ti. Si, sin duda es la bestia.
Corres en su dirección, con el arma preparada y cuando se percata de tu presencia se prepara para atacar, alzas el arma en su dirección y logras dispararle dejándolo inmóvil. Te aseguras que este muerto y te diriges a la alcaldía, allí notificas al alcalde de tus hazañas y te recompensa como es debido.
El día siguiente transcurre con normalidad, la gente empieza a tratarte como un héroe y tu no podrías estar mas feliz con ello. Sin embargo, esa noche tienes sudores fríos y dolores musculares insoportables, sales de tu casa y corres al bosque desorientado.
La gente del pueblo se pregunta qué fue de su héroe y porque los abandonó justo cuando una segunda bestia los comenzó a atormentar.